Un crimen atroz se ha producido en una madrugada de copas, manada y teléfono móvil. Como el agresor y sus cómplices (no menos agresores) incorporaron la palabra “maricón” como insulto que acompañó a la agresión que acabó en homicidio, se ha interpretado inmediatamente que se trata de un acto de odio, de homofobia. Lo explica Lorena G. Maldonado en las páginas de El Español: “Lo único cierto ahora (mientras unos y otros discuten, aún sin datos oficiales, sobre si el asesinato de Samuel tuvo tintes homófobos o no) es que él está muerto. … y aún la grada siente la tentación esa de buscar explicaciones esotéricas a la agresión que acabó con su vida". Y hasta intervienen representantes políticos con enfrentados escarceos tuiteros que no ayudan a una reflexión serena y responsable.
Es evidente que la derecha cuando está en la oposición, los ataques al Gobierno son tremendos, a veces inaguantables. El Gobierno busca soluciones, -acertadas o no, pueden o no gustar-. Pero frente a esos intentos, la derecha solo sabe decir “que eso es traicionar a España. Ni hay debate, ni hay propuestas, ni hay alternativa…, ni mucho menos apoyo alguno; eso ni soñarlo. Es su estrategia. La única solución es “váyase Sr….” Solo se oye, dimisión, elecciones…, y nada más.
Cuando era pequeño y vivía en el pueblo, algunas veces viajábamos a Madrid y los motivos los determinaban las circunstancias de cada momento, para acudir al médico o para asistir a las bodas de los primos de mi padre. Ni que decir tiene que las experiencias no pueden ser más antagónicas.
Bajo el título: "La soledad de la alegría" Ediciones Vitruvio ha publicado en su conocida, amplia y diversa colección: Baños del Carmen, nº 852 el poemario del escritor, editor, periodista, poeta y hombre de radio Juan Andrés Pastor, un tomo de 130 páginas que incluye un centenar de poemas escritos en poesía en prosa, en los que el autor nos demuestra su gran facilidad para versificar, dado que está enormemente bien dotado para dicho trabajo, que suele bordarlo, como lo demuestra en este tomo y cada día en la redes sociales.
Interesante muestra artística que recoge 84 fotografías de artistas españoles y extranjeros, de la “Colección Julián Castilla”, incluida en el Festival Internacional de Fotografía y Artes Visuales Photo España, 2021 y organizado por el Excmo. Ayuntamiento de Villanueva de los Infantes (C. Real), la Fundación Julián Castilla y la colaboración de la Excma. Diputación Provincial de Ciudad Real, que se exhiben en el Museo de Arte Contemporáneo, de la mencionada ciudad manchega.
En política, como en cualquier otro aspecto de la vida, para solucionar algo es imprescindible hacer un diagnóstico, y que sea acertado. Si no se acierta no hay posible solución, o es que lo que se busca no es solucionar el problema. Por ejemplo: cuando Adolfo Suárez hizo frente a la Transición vio con claridad, que, o participaban todos o no había reconciliación. Por eso legalizó el Partido Comunista, y con Fraga y Carrillo en la misma mesa todo se recondujo a buen fin. Un éxito. Al final el PCE contribuyó en mayor medida a la reconciliación que aquellos que se alarmaron por “la traición a España que suponía legalizar al Partido Comunista”
Por fin, tras un tiempo breve de espera, pero que se me ha hecho eterno, ya tengo entre mis manos esta joya única, que es el tomo 1º de la "Poesía Completa", de Pablo García Baena-posiblemente el mejor poeta en lengua castellana del pasado siglo y un amigo entrañable y nada pedante-algo raro en el gremio-, excelente persona y mentor de mi obra-, que, en edición de otro buen colega como es el escritor, editor y conocedor de los poetas y la obras del grupo Cántico, Rafael Inglada, y con una magnífica introducción de Juan Lamillar ha publicado la prestigiosa: "Editorial Renacimiento", en su Colección Calle del Aire, número 203.
Existe unanimidad en considerar los nacionalismos como la causa primera de todos los males, de todos los conflictos que hemos sufrido en Europa, a lo largo de nuestra historia. Es cierto; pero quizá convendría hacer algunas matizaciones. Porque si no podría pensarse que los nacionalismos son malos. No. Intrínsecamente no son malos. Lo malo es, el significado falso que algunos le han adjudicado; por ignorancia, por malas intenciones, o, simplemente por utilizado con otros intereses.
Mientras en mi tierra (Castilla-La Mancha) se me minusvalora y ningunea y no me incluyen, ni citan en las antologías de poetas castellano-manchegos, la editorial Mejicana: "Ayame", me ha dedicado 2 páginas en la antología que reproduce la portada, junto a otros poetas españoles: Luis Antonio de Villena, Juan Andrés Pastor, Juan Carlos Mestre, Rosa Peñasco, Tomás Megía, Fernando Aramburu, Julia Baigorri, Enrique Cabezón, Gemma Córdoba, Manu Espada, Aurora Gámez, Antonio García, Víktor Gómez, entre otros vates de la piel de toro llamada España, que no cito, dado que, haría interminable esta breve reseña, pero que todos ellos/as vibran, laten sus corazones sensibles en este volumen de hermosos versos y bellas ilustraciones que salpican sus impolutas 235 páginas, repletas de sentimientos vivos, que brotan briosos cual río caudaloso o lava ardiente de un volcán en erupción que arrasa todo a su paso.
La indignación corrió de móvil a móvil, en las redes sociales, y se gestó una convocatoria espontánea para concentrarse ante todos los ayuntamientos de España. Echando la mirada atrás, son 41 lxs niñxs asesinadxs desde 2013 y 1.096 mujeres muertas desde 2003.
Es una pena. Un país que sabe hacer frente a los problemas reales, con un nivel de aceptación bastante razonable…, luego se encuentra sumido en procesos de crisis social y política de dimensiones insoportables, provocados por irresponsables. Se presenta una pandemia, y con sus más y sus menos, pero se resuelve con resultados mejores incluso de lo previsible. Eso sí, teniendo que luchar contra el virus, y contra aquellos que no tienen el más mínimo escrúpulo para obstaculizar.
La joven editorial castellano-manchega: "Mahalta", que comenzó su andadura hace poco tiempo con el poemario: "Aquí", del muy activo poeta Francisco Caro, acaba de sacar a la luz: "Aliento", libro de versos del conocido periodista y editor Alfonso González-Calero García, que, anteriormente, había publicado: "Ida y Vuelta"-Editorial Almud- y es autor de una polémica antología: "Brújula. Poesía de/en Castilla-La Mancha", también bajo el mismo sello editorial de Almud, que él dirigía.
Ahora que se cumple un mes del final del estado de alarma hemos vuelto a ese espacio público, tan nuestro, del que nos quedamos huérfanos durante mucho tiempo. Es hora de recuperar las sensaciones que ofrece, de reactivar nuestros cinco sentidos para así volver a percibir otra vez la suave caricia del viento sobre las copas de los árboles, el afinado canto de los pinzones al amanecer, el bronco de los camiones de la basura al anochecer, el desordenado deambular de la gente de allá para acá, el agradable contacto de la brisa mañanera sobre el rostro, la risa alegre de los niños, sus desconsolados lloros, el rumor de los carritos de la compra.
Es en los momentos más críticos, (guerras, crisis económicas, hambrunas, catástrofes medioambientales…) las leyes que rigen el sistema socio-económico hegemónico se oponen frontalmente a los intereses más inmediatos de la humanidad. Esto lo hemos visto recientemente con la pandemia de Covid-19, que ha supuesto uno de los últimos grandes mazazos que hemos sufrido a escala global. La pandemia ha paralizado, en gran medida, el comercio, la actividad económica, el modo de vida, ha agudizado las tensiones geopolíticas y, lo más importante, ha acabado con la vida de más de 3,5 millones de personas y ha infectado a más de 170 millones en todo el mundo.
Los grandes problemas, requieren grandes respuestas. Y esto viene a cuento, porque España tiene un gran problema; un problema que afecta, nada más y nada menos, que a la unidad territorial. Porque, no seamos ingenuos, no nos dejemos engañar, el gran problema que tenemos, ”todos”, es el encaje de Cataluña en España; es un problema de convivencia; es un problema que afecta a la unidad territorial. Ese es el verdadero problema. No son los indultos como algunos quieren hacernos ver.