Asegura que siempre, desde pequeño, le han llamado la atención las fallas cuando las veía por televisión y tuvo claro que quería dedicarse profesionalmente a ese complicado mundo. Y allí terminó. Juanjo Sevior es un joven valdepeñero que decidió formarse para dedicarse profesionalmente a crear fallas y hogueras y sus trabajos ya están destacando a pesar de su corta trayectoria. Junto a su compañero José Priol forman la firma artística Sevior y Priol Arts y ya el año pasado tuvieron varios premios. Para este año preparan ya las fallas de Valencia y Gandía, donde plantarán varias creaciones y una de ellas está siendo bastante aplaudida ya que homenajea a Reyes Martí, pionera en ser artista pirotécnica. Es todo lo que nos ha contado en esta entrevista.
¿Cómo termina un valdepeñero en el mundo de las fallas?
Desde pequeño siempre me ha gustado esta profesión, la veía al principio por televisión y hasta el año 2010 no pude desplazarme hasta allí. Cada 19 de marzo no me perdía la cremá por la televisión y siempre me ha gustado el mundo de la escultura y el arte. Quería estudiar en Valencia pero no había plaza y me quedé en Alicante.
¿Qué es lo que te atrae de este mundo?
Me gusta mucho el mundo del arte, de la escultura y, a la vez, el plasmar tus propias ideas y fantasías en la calle para que todo el mundo lo vea. Cada año puedes hacer algo diferente, plantas una cosa nueva, y te vas comprometiendo a hacerlo cada vez mejor. Es muy creativo.
¿Cómo son tus figuras?
Me estoy especializando en hacer hogueras y fallas infantiles. Dentro de las fallas y las hogueras existen dos modalidades, la adulta, que es la más conocida, y la infantil, que dentro de cada comisión tiene su propio monumento pequeño. Tiene que cumplir unas medidas que son 3x3 metros y son temas infantiles y de fantasía. No hace esa crítica política o social de la falla adulta. Busca más la simpatía y lo gracioso para que a la gente le divierta y también son didácticas, tienen una parte de aprendizaje.
¿Un fallero es un artista?
Por supuesto. Un fallero necesita tener creatividad y originalidad, aunque este mundo es abierto porque muchos artistas firman con su propio nombre pero muchas veces echan mano de pintores, escultores o diseñadores que le hacen el trabajo. Pero un fallero tiene que ser artista porque si no, no llegaría a nada.
¿Crees que es difícil destacar en este mundo? ¿Hay mucha competencia?
Sí, y ahora en las fallas infantiles está habiendo mucho nivel. Tienes que llamar la atención con algo y es difícil tener nombre aquí porque hay muchos artistas falleros pero nombres destacados hay pocos y están bastante demandados. Y a la hora de tener nombre, consigues más encargos.
El año pasado tuvísteis varios premios ¿verdad?
Sí, el año pasado nos estrenamos. Un grupo de gente que estamos estudiando el título de artistas falleros en Alicante, decidimos probar aquí. Lo componemos un madrileño, un valenciano, una alicantina y un valdepeñero. Pensamos que no íbamos a tener suerte con los premios pero tuvimos dos sextos premios en sexta y quinta categoría y un tercer premio en la cuarta categoría, que nos supieron a primer premio.
¿Con qué trabajos?
Hicimos la hoguera San Nicolás de Bari, con el tercer premio; la hoguera San Antón Bajo con sexto premio en sexta categoría; y la hoguera Virgen del Remedio en quinta categoría. Luego plantamos otra que no recibió premio que se llama Nou Alacant. Además, he plantado durante dos años la única hoguera infantil de Torrevieja.
¿Qué estáis preparando para las fallas de este año?
Estamos en el taller preparando tres fallas y hace unos días presentamos en Valencia los primeros ninots, ya que hay una exposición previa para que se vea un poco el trabajo final. Y de esos ninots que se han presentado, la gente tiene que votar y se salvará uno del fuego, uno grande y otro pequeño.
¿Cómo son esos ninots que habéis presentado?
Tenemos un ninot para la falla Puebla de Valverde Segunda República, que son unos egipcios en la corte y un gatito momificado que se lo llevan. Es una escena divertida y se llama 'El secreto de la pirámide'. Repetimos ese proyecto con el que ganamos el tercer premio el año pasado pero aumentado. Tiene más figuras, más escenas y más presupuesto. Ya que nos estrenamos en Valencia queremos dar buena imagen. Y el segundo ninot está siendo muy aplaudido porque se trata de Reyes Martí que es una señora pirotécnica, de Burriana (Castellón), que es muy famosa en la Comunidad Valenciana y el resto de España por ser una de las pioneras en ser artista pirotécnica, algo muy raro, ya que es una profesión de hombres. Todos los años tiene la gentileza el Ayuntamiento de Valencia de que el 8 de marzo, día de la Mujer, sea la encargada de prender la cremá y este año lo pasan al día 18, que es el día grande de las fallas, y a ella le ha encantado el ninot, se lo ha puesto de perfil de Facebook. Es novedoso que unos chicos que plantan por primera vez en Valencia estén causando tanta admiración. Y nosotros estamos encantados.
Además de eso plantamos una falla en Gandía en la noche del 15 de marzo. Para eso estamos haciendo a la princesa Rapunzel, que está en el castillo y el príncipe subiendo por el pelo. Y el ninot de exposición es más fantástico, son unas hadas, que lo presentamos el día 25.
¿Qué características tiene que tener una buena falla?
Debe ser original, que te impacte y te llame la atención, que no sea una montonera de muñecos sin sentido. Tiene que contar una historia. Y se valora mucho el acabado, que esté muy limpita, que se vean las uniones, y si está como volando en el aire, que te creas que está volando en el aire, que no se vea el truco.
¿Quieres añadir algo más?
Sólo decir que me gustaría hacer un monumento fallero para Valdepeñas. Tengo ya varias ideas y me encantaría que mi ciudad pudiera conocer de cerca mi trabajo.
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