Rosa María García Toledo y Pablo Vicente Hellín Olmedo, la primera valdepeñera, y el contrayente natural de la población de Socuéllamos, se dieron el “si quiero” en el transcurso de una celebración civil que acogió uno de los salones de nuestra provincia, tras haber oficializado con anterioridad el compromiso en el Juzgado de Valdepeñas.
El acto comenzó con la lectura del acta matrimonial, a lo que siguió la expresión de algunos artículos del Código Civil.
Llegó el intercambio de las alianzas, siendo los niños de arras, Gael y Laia.
Posteriormente intervinieron por parte de la novia, su hermana Rocío (que fue la madrina), sus amigas Ana Belén, Rosa María, Milagros, María Jesús Merche y Pilar.
Por parte del novio, sus hermanas Rosa y Ana y sus sobrinas Nazaret y María, así como Serapio, el padrino.
Todos recordaron momentos felices, o quizás uno triste como el fallecimiento del hermano de Rosa María, caso de Federico García Toledo “Fede”, un malogrado atleta que se dejó la vida en la carretera.
Se leyeron poesías, y relatos acorde al acontecimiento, y se disfrutó de un gran ambiente incluyendo el coctel de bienvenida, la cena, la barra indefinida y la recena hasta casi el amanecer.
Actuó de maestro de ceremonias, por expreso deseo de los contrayentes, el periodista valdepeñero Ángel López Sánchez, vinculado a la familia de Rosa María desde hace muchos años.
En la foto de Roberto Muñoz, un momento de la ceremonia civil celebrada.