martes, 21 de mayo de 2024, 22:00

Nos dejó José Sánchez Ruiz 'Pepito'

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Pepito



El próximo día 1 de agosto hubiera celebrado sus 94 años (Valdepeñas, 1930), pero días pasados, presentaba su alma ante el Altísimo, tras recibir los Sagrados Sacramentos, José Sánchez Ruiz, conocido coloquialmente como “Pepito el de contribuciones”, y también como “Pepito el del moyuelo”.


El primer apelativo por haberse jubilado de recaudador de tributos en distintos pueblos de la provincia, y el segundo porque su padre, la familia, tuvo un molino para la molienda del moyuelo, ese salvado muy fino, el último que se separa al apurar la harina, de gran relevancia en su época.


 Gran aficionado a la llamada “Fiesta Nacional”, asistió a numerosos festejos, principalmente en importantes plazas de la comunidad andaluza.


 También fue secretario del Consejo Regulador de la Denominación de Origen Valdepeñas, durante la etapa de la también desaparecida María Isabel Mijares García Pelayo.


 Se desplazaba con frecuencia por sus propios medios hasta que ya no le renovaron el carnet de conducir, a los parajes de “Venta de Cárdenas” y a las Lagunas de Ruidera, así como a Benalmádena, en donde tenía una propiedad, y le gustaba quedarse mirando al mar Mediterráneo.


 Antes de que su salud se fuera deteriorando, realizó sendos cruceros y algún viaje de los que organiza el Inserso, ya que siempre tuvo espíritu aventurero y le gustaba mucho viajar, aunque fuera por nuestra provincia para ver paisajes muy diversos.


Gran apasionado a la lectura, no solamente ya de las publicaciones taurinas, sino que fue un hombre de prensa diaria, y de intentar estar muy bien informado.


BIEN RELACIONADO


Bien relacionado con representantes de la Guardia Civil y del Cuerpo Nacional de Policía, como quedó patente en la misa de cuerpo presente que oficiada por el cura párroco de la parroquia del Santo Cristo, Emilio Jesús Montes, se llevó a cabo en la capilla del tanatorio de Nuestra Señora de Los Llanos, en donde sus sobrinos más allegados y su fiel cuidadora Gloria, recibieron el sentimiento de pesar.


 Sus restos fueron inhumados en el panteón familiar del patio de “San Cristóbal” del cementerio municipal de Valdepeñas “Nuestra Señora de Consolación”, donde reposan los de su esposa Lola, fallecida en 2020, y los de su hija que falleció prematuramente siendo niña.


  Fue, durante un buen número de años hermano de la Cofradía de Jesús Caído y María Santísima de la Esperanza, sintiendo también especial devoción por nuestra patrona, la Santísima Virgen de Consolación.


  Descanse en paz “Pepito”, que tan buenas tardes de tertulia tuvo con sus amigos en la terraza o en el interior del “Bar Penalty”. Ahora, se habrá reunido con todos ellos para continuar con sus tertulias celestiales.


  Te recordaremos siempre.