miércoles, 8 de mayo de 2024, 08:04

Mujer musulmana

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Unnamed   2024 03 11T142144



El papel de la mujer en la religión islámica viene definido por el Corán, por la historia y la cultura del mundo islámico. Establece que los hombres y las mujeres son iguales, también señala que los hombres son los protectores y proveedores de las mujeres ya que Alá ha hecho que uno supere al otro y, en esta religión de paz, como la llaman los progresistas, las mujeres son devotamente obedientes a sus esposos.

Sin embargo, la jurisprudencia islámica establece diferencias entre los roles de las mujeres y de los hombres en cuanto a derechos y obligaciones. Esa es la interpretación del hombre, ya que el Corán no fija que la mujer tiene que ser necesariamente ama de casa.

En diversos países musulmanes, gracias a otros analistas, las mujeres poseen un conjunto de derechos en cuanto el casamiento, divorcio, derechos civiles, estatus legal, educación, etc. Pero no sucede en todos los países islamistas, como en Irán y Afganistán que interpretan las leyes en detrimento de las mujeres. Ahí sí que están sometidas a las directrices y vejaciones del hombre, sin apenas derechos, como la educación, vestimenta, trabajo, independencia, etc. No tienen ningún derecho a elegir como quieren vivir sus vidas. Están sometidas bajo el poder de los talibanes.

Por este motivo nos vamos a centrar cómo vive la mujer en el país de Afganistán. Según los talibanes, las mujeres afganas no tienen derecho a la educación postsecundaria, no pueden salir de casa sin ir acompañadas por un hombre, no pueden trabajar salvo en sanidad, y se les prohíbe el acceso a parques, gimnasios y salones de belleza. Y, por supuesto, con la vestimenta adecuada, es decir, el burka.

La violencia de género, todavía, en España no está controlada. Al contrario, desde que Montero estaba en el ministerio de igualdad han subido exponencialmente el número de mujeres asesinadas por sus parejas o sus exparejas. En Afganistán, la violencia contra las mujeres, ha aumentado también exponencialmente, con la correspondiente impunidad para los autores y la consecuente falta de protección y apoyo a las víctimas.

Recuerdo que, en un documental, mientras Afganistán entablaba guerras por ejemplo con Rusia que la invadió, los soldados, iban a luchar. Los que morían en combate dejaban a sus esposas sin ningún tipo de ingresos económicos. El estado tampoco, en este caso, las protegía, y las veías en la calle, sentadas en el suelo, con su Burka pidiendo ayuda para poder alimentar a su familia.

No tenemos que irnos muy lejos cuando se produjo la “huída”, de organizaciones internaciones, cuando abandonaron el país y retomó el control, otra vez, los talibanes. Eran pocos, pero fuertes y muy aguerridos, y volvió, la pobreza, la desidia, la falta de derechos de las mujeres. Obligadas a casarse, sean menores principalmente, con un viejales al que podría considerar como su abuelo. Llevando una vida, que no quiero ni imaginar porque me asquea bastante. Solo para tener hijos, ser una mujer sumisa, y pudiendo, su esposo, como así los llaman poder contraer matrimonio con otras tres mujeres si quería y repudiar a cualquiera de ellas, ya que ellos, con solo tramitar el divorcio, lo tenían aprobado.

Recuerdo también cuando enterraban a las mujeres vivas, y solo asomaba la cabeza para que fueran apedreadas, por haber tenido relaciones sexuales fuera del matrimonio. Y no es que hubiera sido infiel. Simplemente, con una acusación bastaba para morir apedreada. También recuerdo que contaban la historia de que si una mujer había sido violada en su casa y no gritaba es que era algo consentido y si la violaban en el campo, por ejemplo, no gritaba lo suficiente para que alguien la escuchara. Tremendo, ¿verdad? El caso es que no podía defenderse de ninguna manera.

Y, yo me pregunto, donde están todas estas feministas, progres, empoderadas, que no se manifiestan para reclamar a estos países, respeto hacia la mujer y reconocimiento de los derechos como en los países occidentales. Cuando asesinaron a una mujer en una manifestación en Afganistán, no vi ningún Twitter, ninguna declaración a favor de ella. Todas se callan, como “me callo lo que pienso”. No salen a defenderlas. Ya sé que no soy quien, para criticar a nadie, pero me gustaría que se le diera el mismo trato a cualquier mujer, independientemente de donde haya nacido. Espero y deseo, que, de alguna manera, entre organizaciones de defensa de la mujer, se pueda superar este escollo que está durando demasiado tiempo. Yo pondré mi granito de arena. Por todo esto, no puedo decir feliz día de la mujer, porque me acuerdo de ellas y no me trae mas que tristeza.