Este viernes 14 de julio el espacio de Bodegas A7 acogerá la representación de la obra de títeres 'Bucaneros, la isla de coco viejo' de la compañía El Botón Perdido. Un espectáculo que, mediante títeres de mesa, de guante y de sombra, intenta concienciar a los más pequeños y al público en general sobre la importancia de la contaminación de los océanos por los plásticos. Y uno de los actores que encontraremos tras los títeres es el valdepeñero Juan de Dios López, con quien hablamos en esta entrevista.
¿Qué significa para vosotros volver a actuar en Valdepeñas?
Nos encanta poder trabajar en casa y tenemos mucha suerte porque Valdepeñas nos quiere mucho y cada año solemos venir por aquí. Normalmente venimos dentro de la campaña escolar al Teatro Auditorio Municipal para actuar ante escolares de los centros educativos pero ahora lo hacemos para todo el mundo.
¿Qué vamos a ver con ese 'Bucaneros, la isla de coco viejo'?
Vamos a ver una historia de piratas divertida, más canalla que otros espectáculos que tenemos. Es una historia necesaria porque hablamos de la contaminación de los océanos con los plásticos, la idea es concienciar sobre eso. Aunque el mar nos pille lejos, al final siempre llega.
¿Ese sería el mensaje que queréis transmitir?
Sí, concienciar sobre la importancia de la contaminación de los océanos, que al final llega hasta nuestra propia alimentación. En la obra tenemos por un lado a Cosme, que es el pirata bueno, que no quiere ser pirata, sino comprar un barco de arrastre para limpiar una isla de residuos que está al norte del Oceáno Pacífico y tiene tres veces el tamaño de Francia. Pero luego está su tío Barba Roja, que le obliga a ser pirata, y es el lado contrario, no está nada concienciado con el tema de la contaminación.
¿Es más fácil concienciar de esta forma a los más pequeños, con títeres?
Es una manera más divertida y cercana. Los niños entienden las marionetas con otros ojos. En la obra aparecen títeres de mesa, de guante y de sombra. Toda la escenografía y los títeres están hechos por nosotros de manera artesanal. Pero no lo hago yo sólo. Contamos con Nacho Sánchez, que nos echó una mano a la hora de escribir el texto, que es original, y de dirigir la función. Y la parte técnica corre a cargo de Ana Delgado y Javier Jiménez y mi compañera en escena es Ana Torres, de Puertollano.
¿Cómo invitarías a la gente a ir a ver el espectáculo?
Les diría que vamos a pasar un rato divertido para toda la familia porque aunque es una obra infantil, nos gusta meter guiños al público adulto para que entren también en la función. Aunque está recomendada para niños a partir de 5 años pueden venir también más pequeños porque es para toda la familia.
¿Qué más proyectos tenéis?
Con esta función estuvimos girando por el 40 aniversario del Estatuto de Autonomía de Castilla-La Mancha a través de la Junta de Comunidades con teatro de calle en pequeñas localidades. Y este verano estamos girando dentro de la Red de Teatros de Castilla-La Mancha y también con la obra 'Incordelia, el reino de los locos' donde hablamos de que todos estamos un poco locos y tenemos que disfrutar de nuestra locura. Vamos a estar en Bolaños, Socuéllamos, Albacete, Cuenca, entre otros sitios de la región.