Martín pone en valor que Valdepeñas se incorpore como sede transformadora de productos como el pistacho más allá de la vid y el olivo

El alcalde de Valdepeñas, Jesús Martín, ha puesto en valor que la localidad se pueda incorporar como sede transformadora de otros productos como el pistacho, más allá de la vid y el olivo. Es lo que ha señalado durante la visita que ha realizado este lunes a las instalaciones de la empresa Pistachos del Valle, situada en el parque empresarial Entrecaminos desde hace cuatro años.

De esta forma, el primer edil ha recordado cómo el sector agrario se ha diversificado en los últimos años en Castilla-La Mancha dando lugar a una reconversión de nuevas producciones como el pistacho, algo que hace 50 años no existía en esta tierra. Sin embargo, ha señalado, "el primer agricultor que puso en marcha el primer árbol de pistachos no hubiera podido desarrollar su actividad si no hubiera empresarios que después hicieran la mecánica de transformación a producto final y posterior venta", como es el caso de Pistachos del Valle.

Igualmente, Martín ha destacado que empresas como ésta ponen en valor también el potencial del parque empresarial Entrecaminos y del potencial que tiene para el tejido empresarial de Valdepeñas. Una infraestructura que fue puesta en marcha hace doce años pero "no con el ánimo de llenarlo ni en cuatro, ni en cinco, ni en diez años". Y es que, el alcalde ha recordado que Valdepeñas sufrió un crack entre 1985 y 2000 "porque no había un metro cuadrado desarrollado así que hubo tres lustros en los que no hubo implantación de ninguna empresa porque el suelo del Polígono del Vino era escaso y cayó en el mercado de la especulación". 

Así, Entrecaminos cuenta con un millón de metros cuadrados de suelo para que a Valdepeñas no le falte oferta de suelo a 30 ó 40 años vista. En este sentido, Martín ha apuntado a que el 30% de las parcelas están vendidas pero no están desarrolladas por falta de financiación bancaria.

Pistachos del Valle

La empresa Pistachos del Valle se instaló hace cuatro años en Valdepeñas con una inversión de 2 millones de euros y hace unos meses realizaron una ampliación que ha sumado otros 400.000 euros, a lo que hay que añadir el suelo. Cuentan con un volumen de producción de 400 toneladas de pistacho verde en el último año y con una plantilla de cerca de diez trabajadores.

Así, según ha explicado su gerente, Gabriel Antonio Campillo, "hacemos el proceso del campo a la mesa porque recogemos el pistacho en toda Castilla-La Mancha, en lugares como Villarrobledo, Toledo, Valdepeñas, Cuenca, Madrid y Castilla y León, lo recepcionamos, lo pelamos y lo secamos, le quitamos el vacío, separamos el abierto del cerrado y luego hacemos una selección por tamaños".

En el caso de los pistachos cerrados, pasan por una máquina que se llama rompedora, que extrae el grano y se destina a repostería, harina, ensaladas... Y el pistacho abierto y el grano pasan por una mesa de selección para comprobar que cuando llegue la consumidor final lo haga en perfectas condiciones.

Además, la empresa tiene en proyecto la instalación de un tostadero para tostar todo tipo de frutos secos y el volumen de negocio está siendo positivo en este último año gracias en parte a las heladas de Irán y Turquía, por lo que a pesar de la crisis, hay gran demanda de este fruto cuyo precio se ha incrementado en un 10%.

Para el gerente de Pistachos del Valle, se trata de un cultivo que se adapta perfectamente al secano y resulta más rentable que la vid, con una producción de 800 kilos por hectárea a un precio de media de 4 ó 5 euros. En el caso de Castilla-La Mancha existe una superficie de cultivo de 50.000 hectáreas, mientras que en Valdepeñas se calcula que hay más de 5.000 hectáreas de este cultivo.