viernes, 19 de abril de 2024, 19:29

Indiferencia

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Unnamed (65)



Estas fiestas de Navidad ya han terminado. Volvemos a la normalidad después de tres semanas de descanso escolar y días de vacaciones. En estos días, hemos comprado artículos de alimentación en exceso, como si no hubiera un mañana y, siguiendo las tradiciones, acabamos con el chocolate y el roscón de reyes.


Me provoca mucha tristeza, que, en estas fechas, se siga pidiendo alimentos, productos de higiene personal, productos para bebes, como leche y pañales, ya que hay dos millones de familias en el umbral de la pobreza. No sé si nos hemos acordado de estas familias, pero es vergonzante, que, en este país, en el año 2022 siga habiendo familias con extrema necesidad. Se colabora con donativos y con compras en supermercados para paliar las necesidades de estas personas y se concede un cheque por valor de 200 euros para las familias en pobreza extrema, cuando el año pasado se concedían 400 euros a los jóvenes que cumplieran dieciocho años para que voten al partido socialista. Nuevos adeptos para su régimen.


Yo, personalmente, me avergüenzo de nuestros políticos, tan bien acomodados en sus escaños y siga habiendo personas que no tienen nada que llevarse a la boca en estas fechas y que, lo niños, no tengan sus juguetes soñados porque no hay dinero en casa para pagar la luz. Y vemos imágenes de niños estudiando en casa con el abrigo puesto, porque no tienen calefacción.


Yo no soy una persona sobrante de dinero al mes. Tengo que recortar el uso del aire caliente, no tengo radiadores de calefacción, para poder estar más cómoda. Pero me encuentro con personas que no tienen nada y me siento una privilegiada.


Mostramos bastante indiferencia hacia las personas que lo están pasando mal. No solo en nuestro país, sino también en otros países que están en guerra y que mueren a centenares. En Siria, por ejemplo, después de once años de guerra, han muerto 6.000 personas y las familias huyendo del país, se cuentan en millones.


También nos tenemos que acordar de la gente de Yemen, que también está en guerra, pero como está lejos de nuestro continente apenas reciben noticias sobre ello.


Y, nosotros nos seguimos mostrando indiferentes ante el dolor ajeno porque no nos toca tan cerca. Sí, nos acordamos de lo que está sucediendo en Ucrania, ya que nos afecta más directamente y, porque la OTAN, está detrás, además de Estados Unidos, por sus intereses personales contra Rusia.


A fecha de hoy, nadie se ha manifestado en la embajada de Rusia en España, manifestando su oposición a la invasión a Ucrania. Nadie, ni la izquierda ni la derecha. Solo nos preocupamos por tener una buena comida navideña, celebrar el año nuevo con las campanadas, con Risto Mejide, comentando el fallecimiento del hijo de Ana Obregón, y el embarazo de Cristina Pedroche. Si no ataca a nadie, como hacía en operación triunfo, este hombre no es feliz. Por favor, que le quiten el programa. Apesta.


Pero nosotros seguimos a lo nuestro, indiferentes, hinchándonos a comer, a beber, sin querer saber como viven otras personas su situación de penuria y de guerra y no pasa nada. Nos hemos divertido estas fiestas, lo hemos celebrado con la familia, salvo aquellas personas que viven solas y que están abandonadas por sus familiares, esperando que se mueran para heredar su vivienda y especular con la misma.


Nos hemos puesto nuestros vestidos de gala para la nochevieja. Yo fui una de ellas. Ya que es el unido día que salgo en todo el año y me supuso un esfuerzo pagar ese dinero de la cena. Pero, como digo, no salgo nada en todo el año.


Nos olvidamos, en definitiva, de los más necesitados. Y no tenemos cargo de conciencia puesto que no los tenemos presentes en nuestro día a día.


Yo no entiendo a los políticos, a todos ellos sin excepción. Cobrando una cantidad ingente de dinero. Ellos y ellas se llenan los bolsillos con los impuestos, pero sin erradicar la pobreza en este país.


También nos mostramos indiferentes, ante lo que está ocurriendo en Irán desde mitad de septiembre, cuando falleció una joven que no llevaba bien puesto el pañuelo en la cabeza, se le veía un poco el pelo. Y murió en comisaría. Y no estamos dando la publicidad suficiente a las manifestaciones que se producen todos los días. Y que mueren hombres, colgados de una grúa, ahorcados para que lo vea la mayor parte de la población y que sirva de ejemplo. Y no veo concentraciones en España, en la embajada de Irán ni por parte de la derecha ni de la izquierda. ¿qué está sucediendo en este país, ¿Dónde están las feministas? Para manifestar los días ocho de marzo, por los derechos de la mujer que lo veo correcto, hecho de menos las concentraciones exigiendo los derechos más básicos de las mujeres musulmanas.


Y podemos hablar de otro país musulmán como es Afganistán donde tampoco se respetan los derechos fundamentales de las mujeres, pero la izquierda no dice nada. Estamos hablando de la religión de la paz.


Hay que tener cuidado con las mujeres que están adiestrando a jóvenes para cometer atentados islamistas en nuestro país. Y no es broma, ya hay gente detenida por ello.


En definitiva, no podemos vivir ajenos a la pobreza de nuestro país. Tampoco a las personas que están sufriendo los estragos de una guerra, a las mujeres olvidadas por las feministas, que luchan por su libertad, reclamando los derechos básicos y fundamentales de las mismas. Como, por ejemplo, a la educación.


Esta noche mientras estoy haciendo esto, hay una película en la primera de televisión española, de la que no entendiendo ni papa. Gente trans con gente poliamor, gente que tiene relación con mujeres, y se enamoran de un heterosexual. No sé, se me van de las manos tantas diferencias y formas de ser amado y querido por alguien.


Así que pido que toda la población española se vuelque en ayudar a la persona o familias que tiene alrededor y les eche una mano. Que con poquito se puede hacer mucho. Y dejemos de ser indiferentes y egoístas.