viernes, 26 de abril de 2024, 01:28

Las Madres Agustinas recibieron a los componentes de una peregrinación llegada desde Socuéllamos

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El pasado 4 de Junio del 2022, desde Socuéllamos se desplazaron 60 personas entre niños y adultos al convento de San Diego de Madres Agustinas de la localidad de Valdepeñas, para venerar al Santísimo Niño del Consuelo y la Venerable Madre Cándida de San Agustín (Fundadora de dicho convento).


El encuentro nace de grupos de catequesis de la Parroquia de Socuéllamos (3º y 6º de primaria), que unidos a algunos papás/mamás, deciden emprender esta I Peregrinación, haciendo que sea un evento muy especial, ya que ha sido la primera vez que este convento de Monjas de Clausura Agustinianas, recibía una peregrinación de estas características, por lo que fue un acontecimiento histórico y único para el convento y para la localidad de Valdepeñas.



Dicha peregrinación se iniciaba con la Celebración de la Eucaristía, presidida por el Sacerdote de la Parroquia de Socuéllamos, D. Rafael Ruiz Mateos, y donde la participación, el trabajo, la ilusión, la alegría y la actitud de los peregrinos y de las monjas que los acogieron, hicieron que este acto estuviera lleno de emociones y fuera realmente entrañable. Además, al inicio de la misma, por parte de las Madres Agustinas, se les hizo entrega a todos los asistentes de una Medalla y de un llavero de Madre Cándida y el Niño del Consuelo, en señal de agradecimiento y acogida.


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La Eucaristía fue también muy emotiva porque se contó con la colaboración y presencia de devotos de la Fundadora y el Niño del Consuelo y en la cual se recitó por boca de la poeta Teresa Sánchez Laguna, una poesía que se ha “heredado” como Himno del Niño del Consuelo. Dicha Celebración culminaría con el “estreno” del canto de este Himno por parte de los Peregrinos y de las monjas del Convento.


Posteriormente, todos los peregrinos pasaron a las instalaciones del colegio S. Agustín, que alberga este convento, donde por grupos (adultos y niños), se les hizo una representación visual, comentada por la directora del colegio, Sor Maria Isabel, donde se les explicó, las vivencias y datos más curiosos y significativos de la vida de la Fundadora Madre Cándida y de los inicios del Colegio en 1964.


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Después, de la mano de Luis Miguel Ferrero, gran colaborador, los peregrinos se disponen a realizar una ruta guiada por algunas de las calles de Valdepeñas, donde quedan plasmados hechos muy significativos de lo que vivió Madre Cándida en su localidad natal. Dicho itinerario comenzaría visitando el Convento de los Trinitarios (donde estuvieron depositados durante 60 años los restos de Madre Cándida). Después camino a la Plaza subiendo por la calle Virgen, se comentaron anécdotas y reseñas importantes de la vida de esta fundadora, para finalmente dirigirnos a donde nació, en la calle Córdoba, donde se disfrutó de la esencia de esa casa que aún sigue latente.


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Por último, los peregrinos fueron al Peral, paraje donde se compartió comida, se hicieron juegos y se culmina el paso por Valdepeñas.


Según comentan los peregrinos: “es una experiencia vivida inolvidable, para repetirla y para animar a todos los niños de Valdepeñas y alrededores a vivirlo, ya que en este convento y en este colegio se respira y se vive algo muy especial, que ningún otro colegio posee”.


Damos gracias a Dios y a la Virgen por darnos la oportunidad de vivir este día tan maravilloso conociendo a Madre Cándida y al Niño del Consuelo, y agradeciendo a estas monjas del Convento, su gran acogida, su amor y su dedicación que harán que este día jamás se borre del corazón de los peregrinos.