Texto: Sonia Cobos
Fotos: Prudencio Morales
Cante: Pedro El Granaino y Rancapino Chico/ Guitarra: Patrocinio Hijo y Antonio Higuero / Baile: Aitana de los Reyes / Palmas: Luis El Pijote y Edu Gómez / Lugar: Teatro Auditorio de Valdepeñas / Entrada: 500 personas. Valdepeñas, 5 de noviembre de 2021.
El Festival de Arte Flamenco de Valdepeñas celebrado el pasado viernes 5 de noviembre en el Teatro-Auditorio Francisco Nieva volvió a dejar, una vez más, las esencias del mejor flamenco en la ciudad del vino, permitiéndonos vivir otra notable velada artística.
Pedro El Granaino nos regaló un recital excepcional, demostrando por qué hoy en día es una de las voces primordiales del flamenco actual. Su seductora voz, aunque de corte camaronero, encierra el cante de otros viejos maestros. Inició su recital por soleá,
prosiguiendo por granaina, media granaina y abandolao. Desde las primeras letras el público quedó encandilado, ovacionando tanto al cantaor como a Patrocinio Hijo, fiel escudero del granadino, que nos ofreció pinceladas de su depurada técnica.
Completó su actuación con la composición marca de la casa de La leyenda del tiempo de Lorca iniciada por tientos, taranta de Fernando de Triana y cartagenera, un soberbio cante por siguiriya rematada al estilo de Manuel Molina de los que se clavan en el alma, tangos y los fandangos que pusieron la guinda a una actuación admirable.
El cante de Rancapino Chico puso réplica al de su compañero. Acompañado por la guitarra armoniosa y elegante de Antonio Higuero y las palmas ajustadas de Luis El Pijote y Edu Gómez. El chiclanero ofreció otra actuación relevante, muy del gusto del público presente, aunque lejos de alcanzar las cotas del anterior. Comenzó cantando por soleá con su envidiable eco gaditano. Alegrías, tientos, fandangos y tangos fueron sus siguientes cantes, todos interpretados de forma clásica, con gusto y personalidad. Aun así, echamos en falta algún estilo que concediera diversidad a su actuación, basada en exceso en los cantes festeros. Por bulerías, en las que caracoleó por zambra para dar lucimiento al baile de Aitana de los Reyes, que intervino de forma tan brillante como escueta, se acercaba el final de la noche.
El fin de fiesta nos dejó el baile improvisado y burlesco de El Pijote, Edu Gómez, y Antonio Higuero para poner fin a la celebrada vuelta del flamenco al teatro auditorio municipal desde que comenzara la pandemia.