Antonio Maroto: "El dulce más solicitado por Todos los Santos en Valdepeñas son los buñuelos"
Una de las mayores tradiciones que cada año llegan a nuestras vidas coincidiendo con la celebración del Día de Todos los Santos son los dulces. Dulces típicos como los nuégados, los buñuelos o los huesos de santo, que no pueden faltar en estas fechas en ningún hogar valdepeñero. Por eso, hemos visitado la pastelería Horno San Antonio y hemos hablado con su responsable Antonio Maroto.
¿Cuáles son los dulces típicos que se elaboran con motivo del Día de Todos los Santos en Valdepeñas?
Los típicos de toda la vida son los nuégados, los buñuelos y los huesos de santo. En los tres casos, en pastelería Horno San Antonio los elaboramos con la receta tradicional de siempre y de manera artesanal. Nos pasamos toda la semana haciendo estos dulces sin parar.
¿Qué nos puedes decir de los nuégados?
Los nuégados son unas bolitas de masa frita rebozadas con miel de flores y luego echamos por encima anisillos de colores que son típicos en Valdepeñas. Siempre se elaboran con motivo de Todos los Santos en Valdepeñas, aunque en otras poblaciones se hacen para Semana Santa.
¿Qué clases de buñuelos podemos encontrar?
En cuanto a los buñuelos de viento, los tenemos de crema, nata y chocolate. Y por encargo también los hacemos de dulce de leche o cabello de ángel.
¿Y en cuanto a los huesos de santo también los tenéis de sabores?
En este caso los huesos de santo los hacemos rellenos de yema de huevo que es el sabor tradicional. Elaboramos nosotros el mazapán, lo estiramos, lo enrollamos, lo cortamos y los rellenamos de yema de huevo. Luego los bañamos con azúcar glaseado.
¿Cuáles son los más solicitados por parte de la clientela?
Diría que el buñuelo es el número uno y dentro de los buñuelos, el de crema es el más requerido. Luego seguirían los nuégados y finalmente los huesos de santo, que mucha gente se lleva solamente unos pocos para probarlos. Pero el rey es el buñuelo.
¿Qué acogida tienen por parte de la clientela?
Pues se cogen con deseo. Mucha gente nos dice que los teníamos que hacer todo el año pero al ser una festividad familiar, que empieza a hacer fresco, a la gente le apetece tomarlos en casa, en familia sólo en esa fecha.
