Valdepeñas ha condenado este miércoles el asesinato homófobo de Samuel Luiz, joven de 24 años que fue golpeado por siete personas a la salida de una discoteca en La Coruña al grito de "maricón". Un suceso que ha conmocionado a toda la sociedad y que ha movilizado a cientos de personas en la Plaza de España de la Ciudad del Vino portando distintas pancartas en las que se podían leer mensajes como"No murió, lo asesinaron al grito de maricón", "Tu neutralidad te convierte en cómplice del agresor", "¡Entiéndelo! La orientación sexual no determina la forma de ser", "No es un caso aislado", "Cualquiera de nosotros podría ser Samuel" o "El silencio favorece al opresor".
Convocada por la asociación Amparo LGTBI, varias personas allí presentes han tomado la palabra, como ha sido el caso de la concejala de Igualdad del Ayuntamiento de Valdepeñas, Inmaculada Pacheco, quien ha mostrado su orgullo por ver la Plaza llena de gente por una causa así. "Contra la cobardía, el odio y la homofobia sólo nos queda esto, la visibilidad, una realidad diversa, pero real y natural", ha indicado, añadiendo que "es necesario condenar este asesinato y hacer frente al odio mediante la visibilidad, la lucha y perseverancia para seguir viviendo en libertad".
Igualmente, Loida Donado, de Izquierda Unida, ha recordado que este asesinato "no es un caso aislado, forma parte de una estructura que vemos cada día cuando cientos de personas LGTBI sufren insultos, violaciones, vejaciones, y no podemos seguir callando ni tolerando este odio incitado, este dar altavoz y blanquear un discurso de odio que se está llevando vidas". Así, ha señalado que "por eso estamos aquí, para decirles a los que odian que nosotros somos más, que no tenemos miedo pero sí tenemos rabia".
Por su parte, Iván Carabaño, una de las personas presentes en la manifestación, ha agradecido "a todo el mundo que está viniendo porque necesitamos el apoyo porque día tras día gente que pertenecemos al colectivo LGTBI estamos sufriendo ataques verbales o físicos y tenemos que parar esto ya porque no queremos salir con más miedo a la calle porque es algo insufrible el decir no sé si salir a la calle, cómo vestirme, si maquillarme o no, es algo que hay que parar porque lo único que queremos es vivir tranquilos, en libertad y felices y no podemos estar cohibidos porque gente que incita el odio nos ataque".