La pandemia de coronavirus está afectando a todos los sectores. Y eso incluye también al sector del aceite de oliva. Y es que, a pesar de que en el mes de marzo se dispararon sus ventas para el consumo en los hogares por el inicio del Estado de Alarma y la histeria generada, en el mes de abril las ventas han caído un 75,80% en la cooperativa olivarera de Valdepeñas (Colival). Un descenso que viene derivado del cierre de los establecimientos hosteleros en gran medida. Además, con las exportaciones también ralentizadas, en la cooperativa valdepeñera trabajan para explotar otras vías de negocio que tienen mucho que ver con Internet o con la venta por teléfono. Y, por otro lado, Colival celebra este año sus 50 años de vida, con lo que tenían programados una serie de actos para junio, que se han visto cancelados. De todo ello hablamos con su gerente, Consoli Molero.
¿Cómo está afectando el Covid-19 al sector del aceite de oliva?
En el mes de marzo se dispararon las ventas de aceite de oliva por el tema del acopio del consumidor porque pensaban que iban a cerrar los supermercados pero todo lo esencial ha seguido funcionando. Pero en el mes de abril hemos tenido una bajada del 75,80% en nuestra cooperativa y si comparamos con abril del año pasado hay un descenso del 73,87%. El descenso viene también porque nosotros trabajamos mucho con el tema Horeca, que es la restauración, que está ahora mismo cerrado, por lo que es un factor muy importante en nuestra cooperativa. Eso sí, el consumo directo de los hogares ha subido porque al estar en casa las familias se cocina mucho más.
De lo que se vienen quejando las organizaciones agrarias en las últimas semanas es que, a pesar de haberse incrementado el consumo de aceite en los hogares, lo que al final llega al bolsillo de los agricultores no sube...
Partimos desde el día 9 de marzo que en Valdepeñas hubo una manifestación de agricultores por el tema de los precios, precios que a fecha de hoy aún siguen bajando. Realmente el agricultor está en números rojos, no tiene ni para pagar los costes de producción. Los precios cada vez son más bajos y tampoco hay una alegría de consumo. Este sector lleva ya dos años con crisis.
Colival ha seguido trabajando en esta pandemia. ¿Qué medidas de protección e higiene habéis adoptado?
Nosotros hemos seguido trabajando. Cuando se decretó el Estado de Alarma nuestro sector era considerado esencial y hemos seguido trabajando. Únicamente hemos puesto otro tipo de horario para conciliar la vida laboral con la familiar porque al fin y al cabo esto está afectando a todos. Hemos estado trabajando de 8:00 a 15:00 horas aunque desde esta semana ya tenemos horario de mañana y tarde. En cuanto a temas de seguridad en la cooperativa lo hemos reforzado, todos vamos con nuestros EPI's. Hemos ampliado también el servicio de reparto a domicilio, donde también vamos con nuestros EPI's. Ahora que la gente ya está saliendo un poco más, en la cooperativa tenemos todas las medidas reglamentarias, nuestros geles, nuestros guantes, para la gente que venga a comprar aceite, igual que si va a cualquier otro establecimiento.
Otra de las cosas que ha dejado de celebrarse son las ferias comerciales de aceite. ¿Cómo está repercutiendo en Colival?
Teníamos alguna feria en abril pero se ha aplazado al año que viene. Nosotros tenemos muchos clientes que teníamos concertados y lo estamos haciendo a través de Internet, aunque también nos estamos reciclando y junto a otras cooperativas estamos trabajando en una plataforma que consiste en un proyecto europeo para la exportación a Estados Unidos y China. Estos días nos estamos preparando para las ventas a través de esas vías. Y estamos apostando también por el tema on line porque la mayoría de las ventas que estamos haciendo son on line y por teléfono. No podemos dormirnos ahora mismo, tenemos que seguir trabajando por nuestros clientes y por desarrollar otros canales.
¿Y seguís manteniendo el reparto a domicilio?
Sí, salimos a hacer repartos los lunes y jueves. Igual que seguimos abasteciendo a tiendas y supermercados. Y estamos trabajando mucho a través del teléfono. La gente nos llama y les enviamos el aceite a cualquier punto de España. Seguimos trabajando en nuestra línea.
¿Han bajado las exportaciones?
Sí, teníamos operaciones que se han llevado a cabo, pero tenemos que ir poco a poco porque este tema ahora mismo es más difícil.
Como a partir de ahora los restaurantes y bares no podrán tener en las mesas los dispensadores de aceite para que el cliente se sirva, ¿cómo lo vais a suplir desde Colival?
Están prohibidas las aceiteras pero nuestros aceites seguirán estando en bares y restaurantes. Únicamente el cliente tendrá que pedir al camarero que le sirva. Pero nosotros ya llevamos muchos años facilitando a nuestros clientes con el tema de monodosis y tarrinas. Por lo que no tenemos ningún problema ahora mismo. Seguiremos ofreciendo nuestros aceites de Sierra Prieta directamente con botellas o con monodosis. Es algo que llevamos haciendo mucho tiempo. Tenemos una gama de productos compatibles con la nueva normativa.
Este año celebráis vuestro 50 aniversario. ¿Habéis tenido que cancelar los actos de celebración? ¿Manejáis otra alternativa?
Los actos que teníamos programados para el mes de junio no se va a celebrar ninguno. Y cuando la pandemia vaya remitiendo no sé si haremos algo para septiembre o para el inicio de la campaña en octubre. Según como vaya evolucionando la situación. Pero ahora mismo está todo paralizado.
¿Cómo vislumbras el futuro de los próximos meses en el sector del aceite?
Hay que ser cautos porque todavía no sabemos hasta cuándo va a durar esto. El mercado ha bajado en las últimas semanas y con el tema de la lluvia baja más el precio en nuestro sector. Pero todavía es temprano para saber qué va pasando. Y nuestro sector lleva ya varios años en crisis con precios con los que el productor no pueden producir, únicamente que ahora se agrava más. Por eso ahí están las manifestaciones que veníamos haciendo durante los meses de febrero y marzo. Pero hay que tener paciencia y nos tenemos que adaptar a lo que vaya pasando en los próximos meses. Aún queda mucho año y aceite que vender y mercado por explorar y ahí estamos.