La agenda: Apuntar lo más importante crea tu prioridad en la vida
Generalmente mucho de lo que apuntamos está relacionado con el hacer, y muy poco con el SER…
No apuntamos hacer algo que esté directamente relacionado con aquello que me apasiona el alma y alegra el corazón, y que no tiene que ver con lo material, sino con algo que resuena conmigo y que me permite ser yo. Hacer algo por mí, para mí. Algo que mi corazón se sienta pleno.
Debemos de cambiar las agendas que solamente sirven para el trabajo y planificar las semanas, meses y años, por agendas de expresión emocional que tengan páginas donde cada día haya algo para el disfrute del alma, la ilusión y la motivación personal «DE A DIARIO».
A diario escribiendo sobre el presente utilizándola «cada día para sentir el día» y VIVIRLO CON MAYÚSCULAS, pues es la única forma de escribir la vida.
Creemos que siempre nos falta algo por hacer para sacar más partido a nuestros actos y forma de ser.
¿Te has parado a pensar qué necesitas en tu vida para ser feliz y vivir plenamente?
Pues solamente nos hace falta PRACTICAR LA FELICIDAD y no seguir buscándola.
¿No tienes la impresión que se nos pasa la vida esperando que pasen cosas, para después de que pasen esas cosas, ser felices? —Cuando apruebe las oposiciones… —Cuando termine los estudios… Cuando me vaya de vacaciones… Cuando… ¿Cuándo? ¿Cuándo vamos a llevar una vida que permita realizar las tareas diarias con gusto disfrutando del proceso, sin esperar siempre en futuro de los resultados, y que encima si no llegan, me dejen frustrada y mal?
Nos hemos metido en un pensamiento lioso para poder creer que vivir bien tiene algo que ver con ese confort que nos han malvendido y que muchos hemos picado.
La vida es otra cosa. Es libertad, gestión del tiempo, ilusión, seguridad y discernimiento para saber realmente lo que me interesa para poder VIVIR CON MAYÚSCULAS.
Quizás si hacemos una valoración y reflexión podamos enfocarnos con más acierto donde queremos ir y estar, y quizás no sea tan complicado.
Dice un proverbio Zen que «Ser Feliz es sencillo. Lo difícil es ser sencillo»
Ejercicio práctico:
Todos los días hacer algo que te apasione y aporte alegría, que te haga sentir bien.
Haz una lista de las cosas que harías si hoy fuese el último día de vida y por favor hoy, aunque no lo sea, haz algo de esa lista, quizás sea comerte un trozo de chocolate sin remordimiento; quizás no juzgarte por nada; quizás ser amable y dar un paseo con alguien al que quieres; quizás conectar con un pimiento frito, no para comértelo, sino para que sea lo que te importe lo que piensen los demás de ti.
Texto del libro RELAJACIONÁNDONOS, tus herramientas para cuerpo, mente y corazón.
Luis Fernando Caminero López de Lerma
