Jesús Martín: "Vamos a actualizar la imagen de Valcentro y convertirlo en un espacio más agradable para que sea un foco de atracción para el ciudadano"

El alcalde de Valdepeñas, Jesús Martín, sigue fiel a su cita mensual con El Eco de Valdepeñas tras las fiestas navideñas. En esta primera entrevista del año hace un balance positivo de lo que ha dado de sí el 2016 y adelanta los  proyectos más destacados que hay previstos para este año. Entre esos proyectos destaca el que se va a realizar para modernizar la imagen de Valcentro. Y entre las preguntas que los lectores nos han hecho llegar, el primer edil da respuesta a cuestiones relacionadas con la calle Constitución, con los nombres de las calles del Peral, donde se está trabajando para dar una solución a esta cuestión, y con el problema de la suciedad en la vía pública por los excrementos de los perros.

¿Qué balance puedes hacer del año 2016?

El balance es positivo, no todo lo ambicioso que uno quiere cuando empieza el año pero realmente en Valdepeñas no nos ha ido mal. Hemos seguido siendo polo de atracción de grandes firmas comerciales, lo cual nos está dando una revitalización del sector terciario. A lo largo del año se ha notado la mayor afluencia de público de nuestras comarcas naturales porque muchos de esos ciudadanos que pasaban de paso por Valdepeñas camino de Ciudad Real, gracias a la incorporación de grandes firmas que han abierto sus puertas recientemente, han decidido quedarse aquí. Creo que al principio existía un cierto recelo a esa incorporación de nuevas firmas entre el comercio tradicional pero es verdad que el resultado es que viene más gente a reclamo de esas grandes firmas mediáticas y ya que están en Valdepeñas también pasan al pequeño comercio porque si ven algo que les gusta, aunque no traían en la cabeza comprarlo, lo compran. Por lo tanto, estamos empezando a recuperar el sector terciario.

Además, es el segundo año que cerramos las estadísticas de paro bajando de los 3.000 parados desde 2008. A mediados de año antes subía y bajaba el paro y al final se quedaba igual pero es el tercer año consecutivo  en el que cerramos mejor que empezamos y es el primer año en el que lo hacemos de una manera ostentosa con 300 parados menos respecto a como se empezó. Parte de este descenso es gracias al esfuerzo económico que este Ayuntamiento ha hecho. En los presupuestos del año pasado destinamos 1,5 millones de euros para poder hacer más de 300 contratos, a lo que se ha incorporado las ayudas de la Diputación y de la Junta de Comunidades. Con ello hemos mejorado la situación de 300 familias y les hemos asegurado a dos años vista un ingreso mínimo porque después del contrato viene el paro y la ayuda familiar. Y eso beneficia también al sector terciario porque en la medida de que la gente tenga dinero en su bolsillo es en la medida en que también consumen. Y este año llevamos en los presupuestos la misma cantidad para seguir manteniendo los planes de empleo. 

En cuanto al organigrama del año, hemos podido incorporar al patrimonio de Valdepeñas las bodegas A7 que a lo largo de este año se van a convertir en un espacio público, recreativo y cultural. Y otra cosa que vamos a ver este año es que los Baños del Peral, que llevaban dos lustros cerrados, se van a volver a abrir con el trabajo de un estupendo espacio museográfico que estamos actualizando ahora, que se une a las obras que estamos haciendo en la zona de acceso a la pradera para dotar de una salida de mayor seguridad y comodidad del Peral. Y vamos a continuar trabajando en los terrenos que compramos enfrente de los Baños del Peral urbanizándolos con un ambicioso proyecto para quitar el serpentín de carreteras que va hacia las Aguas y hacerlo directo. Por otro lado, hemos encontrado una historia bastante curiosa y ostentosa con la adquisición que hicimos del viñedo que había a la entrada del Peral, donde hemos hallado el baño más antiguo del Peral, que es un vaso pequeño de descenso donde se ve que las aguas fluían a través de un agujero y vamos a convertir la zona en aparcamiento incorporando un elemento patrimonial.

Eso, unido al reasfalto de no pocas calles, del programa de accesibilidad y movilidad de toda la ciudad y con la primera fase de remodelación de la calle Constitución, hace que el 2016 haya sido un buen año, también a nivel económico, pagando a nuestros proveedores por debajo de los 40 días, por lo que Valdepeñas está en un buen momento para que el 2017 se dé bien.

Los presupuestos de 2017 cuentan con cerca de un millón de euros más. ¿Significa eso que Valdepeñas está mejor que hace unos años?

Nosotros decidimos el año pasado hacer una bajada lineal del IBI. Ahora el ministro de Economía ha decidido hacer una revisión del padrón con drones en toda España donde ha sacado un montón de bienes inmuebles en los que, por el devenir del tiempo, se ha cambiado su uso. El IBI es un impuesto que cobra el Estado pero que repercute en el Ayuntamiento. Y esto ha dado lugar a que el millón que perdíamos lo hayamos recuperado porque han salido a la luz una serie de inmuebles que se han reactualizado. De ahí viene que tengamos un millón de euros más, que creo que lo vamos a destinar bien. 

Entre los proyectos ambiciosos queremos actuar en Valcentro para cambiarlo visualmente su interior y exterior. Vamos a iniciar el comedor escolar en el colegio del Lucero en cuanto empiecen las vacaciones. Eso unido a todos los proyectos que tenemos que acabar como las bodegas A7, la segunda fase de la calle Constitución, repercutirá en una ciudad más transitable y, por otro lado, hay dos o tres firmas nacionales e internacionales con las que estamos trabajando y de las que una o dos se van a asentar a lo largo del año. Con lo cual nos vamos a consolidar como polo de atracción comercial no sólo para nuestra comarca sino para localidades hermanas como Manzanares. ¿Eso significa que estamos mejor? Sí, afortunadamente estamos mejor. No estamos como hace ocho años pero desde luego estamos infinitamente mejor de lo que estábamos.

Uno de los proyectos planteados para este año es la remodelación de Valcentro. ¿En qué va a consistir exactamente?

La cara sur, que da a la calle Tomás de Antequera, se va a remozar con un trampantojo sobre el mundo del mercado. Y en el interior vamos a poner una decoración que permita que los más pequeños tengan un espacio donde estar mientras sus padres están comprando. En su conjunto se trata de actualizar la imagen de Valcentro y convertirlo en un espacio más agradable para que sea un polo de atracción para los ciudadanos. Queremos hacer un espacio más abierto a la calle, aunque las entradas y salidas son las que son, pero que genere un mayor confort cuando uno esté dentro. Y quitar esa imagen de tótem muerto que da el mercado visto desde la calle Tomás de Antequera, con lo cual vamos a incorporar a la ciudad un nuevo espacio más agradable para el ciudadano.

Y aparte de este proyecto ¿qué otros verán la luz en 2017?

Uno de los proyectos más ambiciosos es el del Peral, que es un pulmón que tenemos que conservar, que ha estado en unos casos abandonado y en otros agredido. Nosotros hemos trabajado mucho en el Peral pero creo que ahora es cuando más se va a ver todo el esfuerzo que hemos hecho a lo largo de estos años. Hemos adquirido terreno, llevamos el agua potable que no existía, hicimos la canalización de los colectores que no existía, cerramos los pozos negros, conseguimos que el agua tuviera la calificación de mineromedicinal, etc... 

Por otro lado, en el conjunto de la ciudadanía, estamos actuando en cosas que se habían degradado como la Plaza de la Santa Paz, la Plazoleta de San Juan o la recuperación medioambiental de las antiguas viviendas de protección oficial al lado del Puente de Los Llanos. Estamos pensando también en ampliar la limpieza viaria para el año que viene porque hicimos una recolocación por una cuestión presupuestaria hace cinco años y es verdad que en algunos barrios se nos ha quedado corta y tenemos que trabajar para ampliar ese pliego en la medida de las posibilidades. No sé si lo vamos a hacer con la misma empresa que tenemos o a través de los planes de empleo de los centros de educación especial como AFA. Y seguimos la esperanza de que nos toque la lotería con el segundo Edusi. Somos 9.000 ayuntamientos pidiendo y al final seleccionan a unos 90.  Pero sería muy importante para nosotros tener el Edusi porque podríamos comunicar el barrio de San Pedro con el resto del casco de la ciudad con un paso subterráneo en la calle Cristo y cerraríamos la zona norte de Valdepeñas. En ese sentido sabemos cuáles son las cosas que tenemos que seguir haciendo y las vamos a seguir haciendo en la medida que podamos.

PREGUNTAS DE LOS LECTORES

¿Se están cumpliendo los plazos en las obras de la calle Constitución? ¿Cuándo finaliza la primera fase y cuándo empieza la segunda?

La primera fase ya ha finalizado. Sólo falta asfaltarla. El problema está en que no se puede asfaltar por las heladas pero era algo previsto dentro del proyecto. Entonces habrá que esperar a febrero o marzo para que podamos echar el asfalto. Y la segunda fase empezará de forma inmediata cuando esté lista la primera. Los ciudadanos no son conscientes, ni tienen por qué serlo, de lo complejas que son esas obras. Se está enterrando la fibra óptica, una canalización para que llegue la luz sin problemas a la zona norte, el gas, la renovación de las redes de agua y un alcantarillado medioambientalmente sostenible ya que en todas las calles que actuamos metemos colectores para aguas fluviales y aguas residuales. Son obras muy lentas, con muchas canalizaciones que muchas veces chocan entre sí, y en medio de todo eso, la ciudad no se puede parar, el tráfico tiene que seguir pasando y el que tiene el comercio y la vivienda en esa zona tiene que seguir viviendo. Con lo cual, son obras muy lentas que generan muchas molestias entre los vecinos pero que, una vez terminadas, se crea un hábitat que todos agradecen.

¿Se va a actuar para solucionar el problema de los nombres de las calles del Peral?

Sí, estamos ahora mismo trabajando en ello, que ya tocaba por cierto. Cultura está trabajando para darle nombre a todo. Lo llevaremos a un Pleno, y una vez que lo tengamos, que serán dos o tres meses, vamos a señalizar todas las calles con los tótem verticales para que uno, cuando llegue al Peral, sepa en qué calle está. Hay algo que los que son residentes en el Peral no entienden la complejidad de que el paraje pertenezca a dos localidades diferentes, Valdepeñas y Membrilla. Con lo cual, actuar es muy complejo, hay que dar notificación al ayuntamiento afectado y las calles que ahora nombremos lo tenemos que notificar al otro ayuntamiento. Pero también es verdad que hay muy buenas relaciones con los ayuntamientos afectados. 

¿Se tiene prevista alguna medida para los dueños de los perros que defecan en la calle y no lo recogen después, ya que las calles del centro están muy sucias por ese motivo?

Estamos trabajando y no voy a decir en qué pero este año vamos a conseguir si no eliminar, paliar muy sustancialmente este problema. Es obvio que el incivismo de algunos titulares de perros es una cosa escandalosa. Al principio pensamos en actuar sobre el ADN pero para sacar el ADN de las deposiciones y hacer un banco de ADN necesitaríamos que voluntariamente los dueños de los perros se ofrecieran para registrar el ADN de su perro, algo a lo que no están obligados por ley. Y al final lo hemos descartado por dos razones: porque los que son incívicos no te van a facilitar el ADN del perro para que después los pilles y porque en ayuntamientos como Málaga, que lo pusieron en marcha y con el que hemos estado en contacto, ha sido un fracaso porque la gente no lleva al animal a sacar el ADN, al margen de que es una prueba bastante costosa. Pero vamos a buscar otra solución paliativa que lo vamos a hacer a lo largo del año. También hemos empezado ya a multar. Pero yo lo que pediría a todos los vecinos es que si ven a alguien haciéndolo, llamarle la atención, porque al final el infractor se siente incómodo. Además, hay que tener en cuenta que Valdepeñas tiene censados en el casco urbano más de 4.000 perros y fuera del casco urbano, 8.000. Estamos hablando de 12.000 censados y, lógicamente, si ahí no hay una armonía entre vecinos, vamos mal.