La Escuela de Folclore de Fermento arranca un nuevo curso con más de 40 alumnos

Mantener vivas nuestras tradiciones es el espíritu con el que nació la Escuela de Folclore de la Asociación de Coros y Danzas Fermento. Una herramienta que se inició hace siete años con sólo tres niños y con el paso de los años ha ido incrementando su afluencia de alumnado hasta llegar a los más de 40 actuales, de los que la mayoría son niños y niñas, en los que se va sembrando la semilla de las tradiciones para que ellos también los transmitan a las generaciones futuras el día de mañana. 

Y es que ese es el principal fin de esta escuela de folclore, según ha explicado el presidente de Fermento, Alfonso Gómez, quien ha indicado que lo importante "es que no se pierdan nuestras costumbres y tradiciones, que la gente vaya conociendo las jotas y que no las vean sólo como algo de escenario, sino que la jota se puede bailar en cualquier sitio con ropa de calle".

En esta Escuela de Folclore hay tiempo para todo, para enseñar jotas y seguidiyas hasta fandangos, dando un repaso a todo lo que es tradicional en Valdepeñas y en la provincia de Ciudad Real, aunque también a otras piezas de Castilla-La Mancha, según recuerda Milagros Vivar Antequera, vicepresidenta de Fermento.

La Escuela de Folclore de Fermento cuenta actualmente con tres grupos, uno de niñas, que se imparte los lunes, otro de niños y otro de adultos, que se imparten el viernes. Todos los interesados se pueden inscribir en la sede de Fermento, situada en el centro social de Fátima o en el teléfono 626 294015. La matrícula sigue abierta y las clases son gratuitas.