José Antonio López: "Los transgénicos no son ni buenos, ni malos; son una tecnología que vamos a estar obligados a utilizar"
'Ni buenos, ni malos; son transgénicos' es el título de la conferencia que se ha celebrado este miércoles en el centro cultural La Confianza dentro del proyecto Ciudad Ciencia al que el Ayuntamiento de Valdepeñas está adherido en colaboración con el Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) y que persigue como objetivo el de difundir los conocimientos científicos y la investigación.
En esta ocasión se ha puesto sobre la mesa el delicado tema de los transgénicos. Un tema sobre el que ha habido "falta de información por parte de todo el mundo y se levantó un poco la sorpresa o la inquietud si a la hora de consumir esos alimentos manipulados genéticamente pudiera ser perjudicial para la salud humana", ha apuntado el teniente de alcalde de Cultura, Educación, Turismo y Festejos, Manuel López.
La conferencia ha corrido a cargo de José Antonio López, director de Cultura Científica del Centro de Biología Molecular Severo Ochoa y neurobiólogo del departamento de Biología Molecular de la Universidad Autónoma de Madrid, quien ha indicado que "los transgénicos ni son buenos, ni son malos, es una tecnología". Así, ha indicado que "un lapicero afilado es muy bueno si se escribe una poesía pero no es tan bueno si se salta un ojo a alguien". Es por ello que ha señalado que "es un debate bizantino que sólo favorece a unos grupos idealizados que muchas veces faltan a la verdad científica; los transgénicos son una tecnología que vamos a estar obligados a utilizarla sí o sí puesto que con una población creciente y una estimación de más de 10.000 millones de seres humanos dentro de no mucho tenemos que producir más y buenos alimentos, aunque de momento la discusión no deja de ser bizantina porque en España y Europa no se consumen transgénicos porque están prohibidos".
Por último, ha señalado que el tema de los transgénicos es una cuestión delicada de macropolítica y macroeconomía que debería estar por encima del debate social y científico.
