Valdepeñas ha celebrado el día de su patrona, la Virgen de Consolación, con la procesión que ha salido de la Iglesia de Nuestra Señora de la Asunción puntual a su cita como cada 8 de septiembre poniendo punto y final a las Fiestas de la Vendimia y el Vino. No obstante, lo ha hecho bajo amenaza de lluvia y en torno a las nueve menos cuarto de la noche, en vez de a las ocho, a la espera de si salía o no. Finalmente desde la hermandad se ha decidido salir a la calle a la vista de que parecía que no iba a llover, como sí había estado pasando a lo largo del día.
Miles de valdepeñeros se han echado a la calle para venerar a su patrona, en algunos casos tirándole pétalos de flores desde los balcones y dedicándole alguna canción. En la salida procesional no han faltado representantes de las hermandades y cofradías de Semana Santa, así como los miembros de la corporación municipal, mujeres de mantilla, niñas de Primera Comunión y cientos de personas alumbrando.
Rodeada de flores blancas, la carroza de la Virgen, y finalizando la comitiva, las agrupaciones musicales Maestro Ibáñez y Ciudad de Valdepeñas. La procesión ha recorrido las calles Real, Cervantes, Seis de Junio, Cristo y Virgen.